Soria, 5 de julio de 2000

Este acto, como todos ustedes ya saben, es el eje de toda la actividad anual de la Fundación, puesto que en él clausuramos un año académico e inauguramos uno nuevo.

En el año académico 1999-2000, que clausuramos hoy, hemos celebrado el décimo aniversario de la Fundación, y hemos tenido el honor de hacerlo con Sus Majestades los Reyes, que inauguraron nuestra Sede, este antiguo Convento de la Merced, el pasado 29 de noviembre.

El Convento de la Merced, después de un largo y laborioso proceso de puesta en uso, ya es no sólo nuestra Sede nominal, sino el centro operativo de la Fundación, y junto a nuestras oficinas centrales y nuestros archivos acoge las dependencias del Patronato, la Residencia Universitaria, las Aulas Universitarias, el Centro de Apoyo al Hispanismo y la incipiente Biblioteca de la Fundación, cuyo núcleo fundamental, que se suma a donaciones de particulares y de instituciones como la Real Academia de la Historia o Endesa, debemos a la generosidad de los herederos del ilustre profesor Don Francisco Ynduráin Hernández, Especial mención de reconocimiento merece la contribución del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, algunos de cuyos cuadros se exhiben en la planta superior del claustro del Convento de la Merced, entre el mobiliario que la familia García de Valdeavellano nos dejó en herencia.

En el año que se cierra, como puede verse en la memoria que en los próximos días va a empezar a distribuirse, hemos seguido consolidando programas de años anteriores, pero además hemos introducido novedades, manteniendo siempre el rigor y la calidad.

El índice de actividades del año que se cierra consta de 25 programas académicos y de divulgación, 8 programas permanentes, ediciones y de algunas otras actividades.

Nuestra labor se ha seguido desarrollando en Salamanca, Valladolid, Lisboa, Madrid o Bruselas, y ahora también en Barcelona y en Utrecht (Países Bajos). Pero ciertamente el núcleo principal de nuestras actividades tiene lugar en Soria, como
es bien sabido.

Además de publicar anualmente, desde nuestro Centro de Apoyo al Hispanismo, el Boletín para la Asociación Internacional de Hispanistas, La Fundación ha colaborado en la edición de las Actas del XIII Congreso de dicha Asociación, que tuvo lugar en 1998, en parte aquí en Soria.

La enorme preocupación surgida en los últimos tiempos por la preservación del paisaje nos ha llevado a poner en marcha el Instituto del Paisaje, que busca coordinar cuantas iniciativas y estudios sobre esta materia se aborden desde cualquier disciplina.

La Fundación ha dado los primeros pasos para la creación de un nuevo Centro, dedicado al estudio de la Historia Empresarial de España. Y ha puesto en marcha un Centro Coordinador de Formación Hispánica destinado a posgraduados de países iberoamericanos, que en este pasado año académico ha gestionado por encargo del Ministerio de Educación las becas que la Fundación Endesa destina a ese fin.

En este año hemos afianzado dos nuevos programas de divulgación. El primero, en Barcelona -el Encuentro sobre Poesía- dirigido por el ilustre poeta y académico de la Española, Don Pere Gimferrer, miembro destacado de nuestro Patronato, ha reunido este año a una treintena de escritores, poetas y críticos para recordar al poeta Jaime Gil de Biedma diez años después de su muerte. El segundo, en Tordesillas -la Jornada de Literatura y periodismo- ha reunido a representantes de los medios de comunicación de Castilla y León con estudiantes de periodismo, en torno a un escritor y periodista consagrado, en este caso Don José Jiménez Lozano.

La Fundación ha seguido ocupándose de física, en sus Encuentros sobre Fronteras de la Ciencia, confirmando así que consideramos las ciencias experimentales como un área más de la cultura.

En el 99 hemos puesto en marcha un nuevo servicio de guías universitarios, para el yacimiento arqueológico de Ambrona, en Soria, manteniendo los de Numancia y Tiermes, y por último año los de Atapuerca y San Saturio, que pasan ya a ser atendidos por otras entidades.

Otras novedades importantes del 99 han sido la aprobación, en el Patronato de nuestra Fundación que presidieron en este Convento de la Merced SS.MM los Reyes, de un ciclo de Seminarios sobre Arte Iberoamericano, del que ya se ha celebrado en Trujillo la 1ª edición; el foro abierto de desarrollo local, coordinado por Mercedes Molina, que debatirá de forma permanente sobre los principales problemas de Soria y su provincia; la sesión académica en memoria del Dr. Argente, que coordinará Germán Delibes, en la que arqueólogos de Castilla y León hablarán de la arqueología de la región; el ciclo de conferencias de la Cátedra Valdeavellano, en Valladolid; el concierto de música de cámara de la FDS, que pretendemos ofrecer una vez al año en Soria y en Salamanca, en colaboración con Patrimonio Nacional; la rehabilitación del Palacio de los Águila, de Ciudad Rodrigo, que la Fundación está gestionando por designación del Ministerio de Educación y Cultura, desde el que a partir del 2002 se van a potenciar los Encuentros Luso-Españoles de la Cátedra Conde de Barcelona. Y finalmente, la Cátedra Atapuerca, creada ante SS.MM los Reyes, que nace para asegurar en lo posible la continuidad y coordinación de las investigaciones en torno a los yacimientos de Atapuerca, y en cuyo marco se están preparando ya cuatro tesis doctorales.

La Cátedra Carlos V ha extendido sus actividades a los Países Bajos, donde en el Instituto Cervantes de Utrecht hemos organizado un seminario sobre Carlos V, dirigido por el Prof. Lechner, de la Universidad de Leiden. Asimismo la Fundación continúa su colaboración con el Instituto Cervantes de Bruselas, con la Universidad de Amberes (donde tenemos un lector de español), y con otras universidades belgas.
La Fundación, de acuerdo con el Instituto Cervantes, está empezando a instalar Aulas Virtuales de Enseñanza del español en universidades del Este de Europa, como Praga y Budapest.

La lección inaugural del año pasado corrió a cargo del Gobernador del Banco de España, ilustre miembro de nuestro Patronato, Don Luis Ángel Rojo, mostrando nuestra convicción de que la Cultura abarca todas las áreas del conocimiento, incluida la Economía. Y este año tendremos el privilegio de oír la lección inaugural de labios de un maestro de las letras tan reconocido como Don Camilo José Cela, Marqués de Iria Flavia, que ya participó en nuestro I Encuentro de Poesía, en mayo del año pasado.
Sería muy largo citar a todas las personalidades que han participado en nuestras actividades de este año pasado, por lo que inevitablemente debo remitirme a nuestra memoria de actividades, que pronto podrán ustedes consultar.

Antes de hablarles del contenido del año académico que inauguramos, mencionaré que en el último pleno del mes pasado nuestro Patronato ha aprobado la creación del Instituto de Historia del Libro y de la Lectura, que tendrá su Sede en Salamanca, y el programa de la Fundación para Salamanca 2002, que en principio constara de un Encuentro sobre Cultura Sefardí, un Encuentro Luso-Español de Economía, un Encuentro Luso-Español de Arquitectura, un Encuentro de Física, un Congreso de Historia del Libro, un Encuentro sobre Corrección Lingüística, un Encuentro sobre Lenguaje Periodístico, un Seminario sobre el Peso del Español en el Mundo y un Seminario sobre el teatro español anterior a Lope de Vega, además del concierto de cámara al que ya me he referido.

En cuanto al año 2000-2001 que hoy empezamos, quiero decir que se inicia no sólo con la lección de un maestro como Cela, sino con una exposición del pintor Antonio López, especialmente importante por la escasez de obras disponibles de este autor. En este año tendremos el Seminario de Historia de España, dirigido por Joseph Pérez; el Seminario de Historia del Arte, dirigido por Fernando Marías; el Seminario de Ciencias Experimentales, dirigido por Manuel Vidal y Carlos Belmonte; el Panorama de la Literatura Española Actual, dirigido por Santos Sanz Villanueva, que contará con Fernando Arrabal, Juan Luis Cebrián, Manuel Hidalgo y Marina Mayoral; el Seminario de Medio Ambiente, dirigido por Florencio Zoido; el Seminario de Historia de la Lengua Española, dirigido por Humberto López Morales; el Seminario de Historia del Libro, dirigido por María Luisa López-Vidriero; el Seminario de Historia Económica, dirigido por Ángel García Sanz; el Seminario de Arqueología, dirigido por Martín Almagro-Gorbea; el Curso de Industrias de la Lengua, dirigido por María Antònia Martí; un Curso de Arqueología, dirigido por Alfredo Jimeno y Gonzalo Ruiz Zapatero; el Seminario de Documentación, Terminología y Traducción, dirigido por Valentín García Yebra; el Seminario en Amberes, sobre El mesianismo en la época de Carlos V, dirigido por Geoffrey Parker; las Conferencias de la Cátedra Carlos V en Bruselas y Gante; la Sesión académica Dr. Argente, que ya he citado antes; el Seminario de Economía, dirigido por Gloria Begué; el Seminario de Corrección Lingüística, dirigido por Alberto Gómez Font y Leonardo Gómez Torrego; el Seminario sobre el español en el mundo, dirigido por Fernando Rodríguez Lafuente; las Conferencias de Estudios Empresariales, dirigidas a la Escuela de Empresariales de esta Sede; las Conferencias de Difusión de la Cultura Española, dirigidas al público de Soria en general; las Conferencias sobre Lenguaje Periodístico, dirigidas a la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Pontificia de Salamanca; un Encuentro sobre Lenguaje Científico, los Encuentros del Instituto del Paisaje, los Encuentros sobre Poesía, nuevos Encuentros sobre Fronteras de la Ciencia, el primer Encuentro luso-español de Economía (copresidido por Don Luis Ángel Rojo y Don Manuel Jacinto Nunes), y las sesiones del Foro abierto de desarrollo local. Promoveremos también nuevas ediciones de obras nacidas en el seno de la Fundación. Y mantendremos y desarrollaremos el Centro de apoyo al hispanismo, editando el Boletín de la Asociación Internacional de Hispanistas y preparando un nuevo Seminario sobre hispanismo; seguiremos desarrollando las Aulas Virtuales de español; el Centro para la Historia Industrial de España; el Centro Coordinador de Formación Hispánica; la Cátedra Carlos V de Estudios Hispánicos, con su lectorado de español en Amberes; la Cátedra Valdeavellano de Historia de España, la Cátedra Conde de Barcelona, la Cátedra Atapuerca, y el Instituto del Paisaje, además del recién creado Instituto del Libro y la Lectura, y de los Servicios de Guías Universitarios en Numancia, Tiermes y Ambrona. Y por supuesto, seguiremos rehabilitando el Palacio de los Águila de Ciudad Rodrigo, y catalogando y preparando nuestra Biblioteca para que pueda abrirse a los investigadores a finales del 2001.

Como he dicho al principio, hemos pasado nuestro décimo aniversario, y por eso, repasando lo que hemos conseguido hacer, nos planteamos ahora cuáles deben ser las líneas directoras de nuestra actividad para el próximo decenio. Estamos convencidos de la importancia de poner mayor énfasis en estrechar los vínculos culturales que tenemos en común con los demás países de habla española, y esa convicción debe sin duda ser uno de los puntos cardinales con los que se oriente nuestro rumbo.

Termino ya, reiterando una vez más nuestra mayor gratitud a Caja Duero y a todos nuestros otros mecenas, por el apoyo que prestan al proyecto cultural que esta Fundación representa. Y gracias muy especiales también a nuestro Patronato, auténtico cerebro director de cuantas iniciativas culturales se abordan desde la Fundación. Y por fin, no quiero acabar sin referirme a nuestro equipo de gestión, citando a nuestro Secretario General, Don José María Rodríguez-Ponga; al director de esta Sede y coordinador de nuestros Servicios Generales, Don José María García Hernández, y a Doña María Pardo de Santayana, que encabeza el reducido grupo de coordinadores de actividades académicas de la Fundación. Todos ellos están sólidamente comprendidos en alcanzar la mayor calidad y eficacia académicas, y así lo demuestran día a día.