Rosa García Cano fue delegada de la FDS en Ciudad Rodrigo

30 MAYO 2013 La Fundación Duques de Soria, cuya Cátedra Conde de Barcelona tiene su sede en el Palacio de Los Águila de Ciudad Rodrigo, ha rendido homenaje a Rosa García Cano con el descubrimiento de una placa en dicho palacio, con el fin de que siempre sea recordada por todo lo que hizo para que fuera una realidad y se consolidara la Feria de Teatro de Castilla y León, además de su intensa labor como delegada de la Fundación Duques de Soria en Ciudad Rodrigo.

Además del sincero homenaje de la Fundación Duques de Soria a la que fuera su delegada en Ciudad Rodrigo, Rosa García Cano, la Fundación Duques de Soria de Ciencia y Cultura y Hispánica ha invitado hoy al mundo de las artes escénicas de Castilla y León a mirar al teatro iberoamericano con el fin de buscar nuevos mercados.

El presidente de la Fundación Duques de Soria, Rafael Benjumea, ha instado a los gestores de este certamen a mirar, al igual que lo hacen hacia Europa, al mercado teatral latinoamericano.

Ciudad Rodrigo debe ser el referente del mercado teatral latinoamericano, ha dicho Rafael Benjumea, ya que esta localidad salmantina es, desde hace 16 años, la sede fija de la Feria de Teatro de Castilla y León.

Desde la Fundación Duques de Soria han manifestado su intención de seguir trabajando en Ciudad Rodrigo, a través de la Cátedra Conde de Barcelona, en el fomento de las relaciones entre España y Portugal.

En Ciudad Rodrigo, la Fundación Duques de Soria y Cívitas Animación Teatral gestionan la única biblioteca de teatro de España y Portugal que existe en la península ibérica.

En el homenaje han estado presentes representantes de las instituciones y asociaciones más representativas de Miróbriga (AFECIR, ADECOCIR, FEVESA), los responsables municipales, el secretario general de la Subdelegación del Gobierno, Miguel López, o el jefe del Servicio Territorial de Cultura, el mirobrigense Adolfo Domínguez, además de la directora y subdirectora de la ONCE en Salamanca. Cívitas también ha acudido al completo y también han asistido las dos hermanas de la homenajeada.

PALABRAS DE RAFAEL BENJUMEA, PRESIDENTE DEL PATRONATO DE LA FUNDACIÓN, EN EL HOMENAJE A ROSA Mª GARCÍA CANO. CIUDAD RODRIGO, 30 DE MAYO DE 2013

Señor Alcalde, querido Javier, muchas gracias por darnos hoy la bienvenida a Ciudad Rodrigo, y por tus palabras que tanto agradecemos desde la Fundación.

Ilustres autoridades presentes (regionales, provinciales, comarcales, locales y eclesiásticas, públicas y privadas); compañeros, amigos y familia de Rosa; muchas gracias por acompañarnos en este acto.

Muchas gracias a todos por haber acudido hoy a este Palacio de Los Águila para acompañar a la Fundación Duques de Soria en el homenaje póstumo que la Fundación dedica a Rosa María García Cano, en el primer aniversario de su muerte. Su Alteza Real la Infanta Doña Margarita y el Duque de Soria me han rogado que sume el homenaje de ambos, desde el cariño y la admiración que profesaban a Rosa, al homenaje que los que nos hemos reunido aquí vamos a rendirle. Y me han pedido que lo haga patente de forma especial a las hermanas de Rosa que también nos acompañan.

Queremos honrar su memoria porque en su vida hizo muchas cosas merecedoras de que las recordemos, y porque conservar su recuerdo es un modo de mostrar un ejemplo de vida dedicada a ser útil a los demás, especialmente como referencia para los más jóvenes. Estamos seguros de que el actual Delegado de la Fundación Duques de Soria en Ciudad Rodrigo, Carlos García, que nos acompaña, tendrá muy presente a Rosa como modelo de devoción al trabajo y de búsqueda de la excelencia en cada detalle.

Rosa, Rosa María García Cano, era una enamorada del teatro, y lo daba todo por el teatro. Desde la Fundación Duques de Soria tuvimos ocasión de conocer bien su gran valía, su sensibilidad, su eficacia, sus valores humanos. Porque desde que en marzo de 2002 (hace más de 11 años) la Fundación concertó una colaboración estable con la Asociación Civitas, de la que este espacio es el resultado más visible, ella actuó a todos los efectos como delegada de la Fundación en Ciudad Rodrigo. Fue el Prof. Emilio de Miguel, entonces patrono de la Fundación, quien con gran acierto nos puso en contacto con Rosa, y su iniciativa resultó ser muy positiva.

Rosa García Cano, como máximo exponente de Cívitas, ha sido el punto estable de convergencia de todas las fuerzas que, tras 15 años de trabajo y apoyo constantes, han hecho posible la consolidación de la Feria de Teatro de Castilla y León, que tanto vigor aporta a Ciudad Rodrigo y a Castilla y León.

Rosa era una mujer de apariencia frágil, que ocultaba (pero sólo a quienes no la conocían) una voluntad férrea, inquebrantable. Los obstáculos los percibía como un reto que había que superar. Y los superaba uniendo a su fuerza una extraordinaria flexibilidad, que nunca la desviaba de su rumbo. Pocas personas he conocido con tanta capacidad de resolver situaciones difíciles haciéndolas parecer fáciles.

Ese talento lo puso sobre todo al servicio de la Feria de Teatro y del teatro en general. Pero también puso sus cualidades al servicio de la Fundación Duques de Soria, y de ello tuvimos el privilegio de beneficiarnos durante años, hasta que la enfermedad se cebó en ella, sin que la fuerza de su voluntad consiguiera imponerse.

La implantación y la vitalidad de la Feria de Teatro son la mejor herencia que Rosa deja a Ciudad Rodrigo, a esta ciudad a la que tanto quiso. El Teatro y Ciudad Rodrigo eran sus dos grandes prioridades, y la Fundación Duques de Soria tuvo la suerte de que Rosa le hiciera un hueco entre ambas, ayudando a que la Fundación se sintiera muy próxima a ambas.

Este Palacio de los Águila de Ciudad Rodrigo, donde la Fundación Duques de Soria tiene su otra sede fuera de Soria, ha sido testigo de esa simbiosis de sensibilidades que con tanta naturalidad administraba Rosa, desde este mismo sitio, entre estos mismos muros, desde el año 2002.

En su papel, asumido a conciencia, de delegada efectiva de la Fundación Duques de Soria en Ciudad Rodrigo, no entraba nunca en conflicto con su papel estelar de Directora de la Feria de Teatro. Rosa supo hacer plenamente suyos los fines de acercamiento luso español de la Cátedra Conde de Barcelona, en la que la Fundación enmarca desde hace 20 años sus iniciativas de encuentro e intercambio entre grupos de intereses afines de Portugal y España.

Y no fue ajena a ello la orientación de la Feria de Teatro hacia nuestros vecinos portugueses, al mostrar en España la vanguardia del teatro portugués y a los programadores lusos las últimas realizaciones teatrales de España y del resto de Europa.

La Fundación tiene la satisfacción de que este homenaje a Rosa María García Cano es el primer acto público en el que exhibe su nueva denominación ampliada: Fundación Duques de Soria de Ciencia y Cultura Hispánica. Con este apellido, de ciencia y cultura hispánica, la Fundación quiere identificar los valores que desde el principio cultiva y han sido su razón de ser, y con los que tan identificada se sintió siempre Rosa. La Ciencia es el conocimiento, en general: es lo que nos hace progresar a los seres humanos. Y el mundo hispánico, la comunidad cultural hispánica, es la gran riqueza que España comparte y que entre todos debemos ser capaces de administrar y de hacer crecer. Para la Feria de Teatro de Castilla y León, que es la hija intelectual de Rosa García Cano, el reto es ahora mirar al mundo escénico iberoamericano, y que el teatro iberoamericano tenga en Ciudad Rodrigo una de sus referencias mundiales.

Queridos amigos, ahora os pido que me acompañéis a descubrir la placa que desde hoy lucirá, en memoria de Rosa, en las oficinas de la Fundación en este Palacio de Los Águila, desde las que ella tanto trabajó y tanto se esforzó, con ese éxito que todos conocemos y que todos vamos a seguir recordando cuando pasemos junto a su placa.

Muchas gracias por acompañarnos, gracias por estar aquí hoy.

Las hermanas de Rosa, el alcalde de Ciudad Rodrigo, Javier Iglesias, y el presidente de la FDS, Rafael Benjumea